La Comarca Campo de Daroca es uno de esos lugares por donde el tiempo, no solo pasa muy despacio, sino que a veces parece que se detiene.

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Fuimos un lugar de oportunidades para las tres culturas del s. XII cuando nos convertimos en la inexpugnable frontera sur de Aragón. Los derechos forales de Daroca y su Comunidad de Aldeas atrajeron a gentes cristianas, musulmanas y judías. En el s. XIII Daroca era una de las mayores ciudades de Aragón y con ello llegó el arte, la belleza y la música.

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Somos un lugar de rarezas naturales, de lagunas saladas que no ven el mar, de formas de cultivar como en el Nilo sin haber estado nunca allí, de bosques africanos en el profundo Aragón, de caliza modelada gota a gota, de miles de aves que siempre vuelven a visitarnos. 

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Pero a pesar de nuestras rarezas, lo que realmente nos distingue son las ganas de vivir nuestro paisaje y patrimonio, sin estridencias, suave, cómodo. 

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Nos distingue el silencio, la calma y los grandes paisajes abiertos donde poder viajar con un estilo libre. ¿Vienes?